miércoles, 11 de agosto de 2010

Empezando por el principio


 

Gorda. Maya Hanisch

Para empezar, no hay nada como presentarse....

Sexo: Mujer
Edad: 43 años
Procedencia: Madrid
Profesión: Parada
Estatura: 1,73 m
Peso: 90 Km
Estado Civil: Divorciada

¿Por qué empezar hoy un blog? He tomado una decisión. Estoy en paro desde hace un año y ocho meses, desde entonces he engordado treinta kilos. Lo mío me ha costado; horas y horas tirada en el sofá, comiendo cosas hipercalóricas y bebiendo mucho, mucho alcohol. No contabilizo los amigos perdidos, ni las citas a las que no he acudido, ni los meses que llevo sin follar. Creo que es el momento de parar. Si no, no sé si seré capaz de volver algún día.

Primera dicisión: salir del ostracismo, perder el miedo a lo que hay fuera y recuperar la autoestima. Seguro que me llevo unos cuantos palos mientras, pero eso es mejor que este coma de dejadez y alcohol. En este apartado entraría: llamar a los amigos, relacionarme y decidir cual va a ser mi rumbo profesional.

Segunda decisión: perder peso. Hoy es mi primer día y he empezado por un día de ayuno, sólo agua, mucha agua. Demasiada agua. Y más agua. Después de visitar alguna que otra página de esas de dietas drásticas, he barajado la posibilidad de pasarme un mes ayunando. No sé, hoy es un día de prueba, si lo llevo bien, quizá alargue el ayuno algún día más. ¿Un mes? Demasiado bestia, me parece.

Tercera decisión: cortarme el pelo al dos. Hecho, después de llevar siete años dejándome crecer la melena. Ha sido liberador. Estaba harta de tintes y cuidados intensivos para que mi larga cabellera pareciera la de una mujer con veinte años menos que yo. Así que, después de un par de meses sin teñirme, he eliminado todo lo artificial que había en mi cabeza (por lo menos en el exterior) y luzco un rapado donde el cincuenta por ciento son maravillosas y blancas canas.

Cuarta decisión: contar lo que me va sucediendo día a día, a modo de diario, en este blog. Compartir con todo el que quiera leerlo el goteo de sensaciones, cambios físicos, pequeños éxitos y los bajones por los que seguro que voy a pasar.

Ya sabéis, se dice que las penas compartidas son menos penas ... No tengo ni idea de lo que resultará, pero ahí vamos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario