martes, 31 de agosto de 2010

Alcohol




Volver a emborracharme. Bebo, todo lo que cae en mis manos. Bebo para salir de mí, para no sentir. Pero cuando ya estoy lo suficientemente borracha, los recuerdos se vuelven más dolorosos, se hacen reales. Bebo para no sentir, pero vivo más la ausencia, el dolor, la soledad. Intento no hacerlo y en cada caída la fe en mi misma disminuye, disminuye si es que queda algo dentro de mí bueno hacia mí misma. Ayer bebí y él entró, se sentó a mi lado y acarició mi rostro con roce mínimo. Mientras, me miraba como si yo no estuviera allí.

3 comentarios:

  1. que bonitoo!!, yo no bebo no me sienta nada bien xD te sigo y te agrego a mi blogroll^^

    Besoooooos^^

    ResponderEliminar
  2. Gracias, pensé que nadie me leía. es una alegría saber que alguien se pasa por aquí

    ResponderEliminar
  3. ¡Qué momento más duro!
    Saludos

    ResponderEliminar